Este lugar me queda perfecto. Tiene wi-fi gratis, recepción 24 horas y té en la habitación. En mi primera estancia, el personal me devolvió algo que olvidé. ¡Recomiendo este hotel para disfrutar de una agradable experiencia! Volveré para Navidad.

La habitación era diminuta, apenas me podía mover con mis maletas. Además, el olor fuerte debido a las obras era simplemente inaceptable. Pedí un upgrade como debería ser por la incomodidad, pero claro, aquí no parece que importen los detalles. Casi dejo una buena reseña, pero simplemente no pude.

Habitaciones limpias y cómodas. El baño es amplio respecto al tamaño de la habitación, lo cual es un plus.

El ascensor es extremadamente estrecho, capaz de albergar a solo un par de personas con poco equipaje, lo que resulta incómodo y engorroso. La habitación es pequeña y, al viajar con maletas grandes, el espacio se siente aún más limitado. Además, he experimentado ruidos molestos durante la noche provenientes de la puerta de acceso a las escaleras, lo que interrumpió el sueño.

La ubicación del hotel fue excepcional, a solo 10-15 minutos a pie de la Torre Eiffel, lo que nos permitió disfrutar de paseos encantadores por el barrio. había una variedad de restaurantes y cafés cerca, donde probamos unos deliciosos croissants y cafés que hicieron nuestras mañanas muy agradables. La habitación, aunque un poco pequeña, contaba con un baño limpio y cómodo, además de un hervidor de agua que nos fue muy útil para preparar infusiones.

El ascensor era extremadamente pequeño, lo que resultó complicado para movernos cómodamente con el equipaje, especialmente para mí.

Le Beaugency es un hotel muy bien ubicado, a solo 10-15 minutos caminando de la torre Eiffel. Las instalaciones son cómodas y cuentan con un hervidor que fue muy útil. La limpieza diaria de la habitación fue excelente. Además, la atención en la recepción fue muy amena, especialmente con Mathieu, quien nos hizo la estadía aún más agradable.

lo recomiendo

Estuve en Le Beaugency y me encantó la ubicación, a solo 10-15 minutos caminando de la Torre Eiffel. La habitación era pequeña pero cómoda y todo estaba muy limpio. Además, el baño era amplio y el hervidor resultó muy útil para preparar un café.

Las habitaciones son acogedoras y hay una buena conexión de metro cerca. ideal para explorar la ciudad rápidamente.

Recomendable para viajeros que buscan comodidad

El hotel está en un barrio lleno de cafés y panaderías, realmente lo que uno imagina de estando en Europa. Un día decidí ir a caminar y encontré una pastelería que tenía unos croissants frescos, los mejores que he probado, y todo estaba a una corta distancia. Además, está cerca de la estación de metro, solo a un par de minutos, lo que facilitó moverme por toda la ciudad sin problemas.

No fue barato, pero aceptable teniendo en cuenta la ubicación.

hotel muy limpio y camas comodas. las habitaciones son un poco pequeñas.

Me encantó mi estancia. La limpieza diaria fue impecable y el hervidor en la habitación fue un detalle muy cómodo. Definitivamente volvería.

Ubicación excelente

El hotel está en un barrio muy bohemio, con bares y cafés súper lindos. La habitación era pequeña pero muy cómoda y todo estaba limpio. Me encantó que había una tetera en la habitación, ideal para preparar un café. Aunque el baño era pequeño, tenía todo lo necesario. Una cosa que podría mejorar es el desayuno, ya que no estaba incluido.

La ubicación del hotel es excepcional, a solo 10-15 minutos caminando de la Torre Eiffel. La habitación cuenta con un hervidor que fue muy útil, y la limpieza diaria fue excelente. Además, la atención en la recepción fue muy amable, especialmente con Mathieu, quien hizo que nuestra estadía fuera aún más agradable.

El ascensor es extremadamente estrecho, lo que resulta complicado para movernos cómodamente con el equipaje, especialmente porque llevábamos maletas grandes.

Ubicación ideal para pasear.

Ubicación excepcional, cómoda y limpia. Vimos la Torre Eiffel desde la ventana. Ideal para familias, con bares y supermercados cerca. Perfecto para pasear por París.

El ascensor es tan pequeño que caben dos personas. y eso si hay buena voluntad.

La habitación era acogedora y muy limpia, con una vista increíble de la Torre Eiffel. Tenía todo lo necesario, incluso un hervidor que fue genial para preparar café. El baño, aunque pequeño, estaba bien equipado y mantenido. Eso sí, un poco más de espacio no habría hecho daño, ya que es un poco justa si viajas con maletas. Pero para dormir y descansar, estuvo bastante bien.